Texto de opinión sobre la realidad hondureña en 29 de julio de 2012.
Hace
unos días, mientras caminaba por el bulevar, un tipo en una moto se
me aproximó a bastante velocidad con la mano extendida. Supongo que
planeaba arrebatarme algo. Como iba tan rápido, creo que si me
alcanzaba, los dos íbamos a salir disparados. Nunca me había pasado
en la zona donde regularmente me desenvuelvo. Esto muestra la
aceleración de la descomposición interna del país. Me imagino que
el asunto se va a agravar. Iba a proponer que la democracia sólo
funciona cuando hay prosperidad o al menos estabilidad. Pero que en
momentos difíciles como el actual, este modelo político genera más caos
debido a los reclamos desesperados de la gente por más autoridad u
orden. Luego empecé a buscar material sobre democracia en Internet y
me llevé una sorpresa: Honduras no es democrática. Somos
evaluados por otros como régimen híbrido.
Como yo lo veo, somos una democracia electorera. La legitimidad del
gobierno se basa en el proceso electoral de cada cuatro años. Luego,
un pequeño grupo se encarga de tomar las decisiones. Pero siempre
hay un reclamo social que atender. La opinión general es encarrilada
al interés de la minoría poderosa, a través del bombardeo
mediático. El pueblo clama orden y seguridad, es decir menos
libertad a cambio de tranquilidad. Pero con un cuarenta por ciento de
la población desocupado, ninguna medida de seguridad dará
resultados. El problema está empeorando.
En
wikipedia encontré que:
Democracia es
una forma de organización de grupos de personas, cuya característica
predominante es que la titularidad del poder reside
en la totalidad de sus miembros, haciendo que la toma de decisiones
responda a la voluntad colectiva de los miembros del grupo. En
sentido estricto la democracia es una forma de organización
del Estado,
en la cual las decisiones colectivas son adoptadas por
el pueblo mediante
mecanismos de participación directa o indirecta que le
confieren legitimidad a
los representantes. En sentido amplio, democracia es una forma de
convivencia social en la que los miembros son libres e iguales y las
relaciones sociales se establecen de acuerdo a
mecanismos contractuales.
El
texto siempre deja dudas. Lo que podemos decir es que Honduras es
algo así como una mezcla: demagogia pluto-cleptocrática. Es
demagogia en el sentido de que no se le ofrecen soluciones a la
gente. Tenemos una campaña política espantosa sin que entendamos
qué se proponen los aspirantes al poder. Lo plutocrático se refiere
a que sólo quien tiene acceso a cantidades inagotables de dinero,
puede sostener una campaña. La gente ya está acostumbrada a que
todo político tiene que regalarle algo. Así que hay que manejarse
con el dinero de la gente más rica para mantener una campaña
política. Lo de cleptocracia pues es lo que todos percibimos: llegar
al poder para hacer fortuna.
Antes
de empezar a escribir esto, me proponía plantear que en vez de
democracia, deberíamos tener un régimen autoritario temporal para
salir de la crisis y lograr darle un rumbo al país. Pero siempre se
me venía una duda a la cabeza: ¿quién se encargaría de dirigir
tal gobierno? Después de leer un poco, me acuerdo de que en realidad
lo que tenemos es un remedo de democracia, con gente en el poder que
toma decisiones al capricho. Montar una dictadura con los mismos de
siempre, aparentemente sólo empeoraría las cosas.
El país flota a la deriva. El estado fallido es una amenaza que nadie se toma en serio. El escenario mundial no da esperanzas. En lo más inmediato, pienso que veremos un incremento progresivo en la violencia, los asaltos en la calle, extorsiones, secuestros exprés, estafas, asaltos en tu propia casa, más gente apareciendo ejecutada en grupos por las mañanas, cárceles sobrecargadas, narcotráfico, menos libertad y más corrupción. Creo que en algún momento va a producirse una protesta política violenta de grupos diversos. Es decir, guerrillas urbanas o rurales.
El país flota a la deriva. El estado fallido es una amenaza que nadie se toma en serio. El escenario mundial no da esperanzas. En lo más inmediato, pienso que veremos un incremento progresivo en la violencia, los asaltos en la calle, extorsiones, secuestros exprés, estafas, asaltos en tu propia casa, más gente apareciendo ejecutada en grupos por las mañanas, cárceles sobrecargadas, narcotráfico, menos libertad y más corrupción. Creo que en algún momento va a producirse una protesta política violenta de grupos diversos. Es decir, guerrillas urbanas o rurales.